lunes, 17 de junio de 2013

El árbol de los amigos

Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino. Algunas recorren todo el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, mas otras apenas las vemos entre un paso y otro. A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.

Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos. El primero que nace del brote es nuestro papá y nuestra mamá, nos muestra lo que es la vida. Después vienen los amigos hermanos, con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros.

Pasamos a conocer a toda la familia de hojas a quienes respetamos y deseamos el bien.

Mas el destino nos presenta a otros amigos, los cuales no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino. A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón. Son sinceros, son verdaderos. Saben cuando no estamos bien, saben lo que nos hace feliz.

Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón y entonces es llamado un amigo enamorado. Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies, cosquillitas a nuestro estómago, etc.

También existen aquellos amigos por un tiempo, tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas. Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro, durante el tiempo que estamos cerca.

Hablando de cerca, no podemos olvidar a los amigos distantes, aquellos que están en la punta de las ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre hoja y otra.

El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas, algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.

Pero lo que nos deja más felices es darnos cuenta que aquellas que cayeron continúan cerca, alimentando nuestra raíz con alegría. Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.

Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, suerte y prosperidad. Hoy y siempre... simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros. Habrá los que se llevaron mucho, pero no habrá de los que no nos dejaran nada.

Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por causalidad.


- Jorge Luis Borges

martes, 11 de junio de 2013

Pink Floyd feat Nicolás de Cusa





Hey you,
Out there in the cold,
Getting lonely, getting old,
Can you feel me?
Hey you,
Standing in the aisle,
With itchy feet and fading smile,
Can you feel me?
Hey you,
Don't help them to bury the light.
Don't give in without a fight.
Hey you,
Out there on your own,
Sitting naked by the phone,
Would you touch me?
Hey you,
With your ear against the wall,
Waiting for someone to call out,
Would you touch me?
Hey you,
Would you help me to carry the stone?
Open your heart, I'm coming home.
But it was only fantasy.
The wall was too high, as you can see.
No matter how he tried he could not break free.
And the worms ate into his brain.
Hey you,
Out there on the road,
Always doing what you're told,
Can you help me?
Hey you,
Out there beyond the wall,
Breaking bottles in the hall,
Can you help me?
Hey you,
Don't tell me there's no hope at all.

Together we stand, divided we fall.





Puntos de confluencia entre De Concordantia Catholica de Nicolás de Cusa y The Wall (made in Pink Floyd):

-Exhortación a recordar lo que habíamos olvidado: El reloj de Micky Mouse de Pink guarda un paralelo con la idea platónica reflejada en Nicolás de que conocer es recordar y hay que volver a las fuentes para garantizar la unidad.
-La luz como imagen del Ser -ausente en todas las animaciones pseudo psicóticas de la película así también como sentido común y esperanza en el Misterio-
-Idea de comunidad como presupuesto para la búsqueda y responsabilidad para con el Misterio -contrapuesta con la soledad del artista facho que tenía menos relaciones humanas que una mandarina-


Dionisia la Aerosilla

domingo, 2 de junio de 2013

Partido



"Hegel argumenta que la realidad es solo un adjunto a priori de las éticas no naturalistas, Kant a través del imperativo categórico sostiene que ontológicamente solo existe en la imaginación, y Marx dice que estaban fuera de juego"